Hay gente que para
vivir su amor, necesita echarle mucho valor a la vida que le ha tocado.
Lo digo porque
cuando vivíamos en un pueblecito, de la carretera de Madrid, que durante siglos
fue el Camino Real.
Estábamos a las
afueras del pueblo, había tres casas modestas (una la nuestra) junto a la casa
grande de los señores, era la casa de los Gonzalo, un enorme caserón de estilo
neoclásico, con un gran jardín con estatuas de mármol. Uno de los descendientes
de la familia Gonzalo era el único que aún iba todos los fines de semana, se
llamaba Javier, bueno en toda la comarca le decían Don Javier (menos nosotros)
que estaba casado con Toñi.
Era un matrimonio
algo particular ó así me lo parecía a mí, porque nunca les vi darse un beso, cogerse
de la mano, una caricia ni si quiera discutir, no sé si los burgueses aman de diferente manera que nosotros los
pobres.
Javier tenía veinte
años más que Toñi, pero para tener setenta años estaba muy bien cuidado, era
muy creyente, iban todos los días a misa de ocho en el centro de Valencia.
Javier ya estaba jubilado claro, y se dedicaba
a pasar todo el día metido en su despacho leyendo cosas de sus
antepasados, intentaba escribir la historia de su familia, pero así llevaba
años y años.
Toñi tenia cincuenta
años y no era de familia burguesa, su padre se hizo rico con el estraperlo de
después de la guerra civil española, por eso sus amigas burguesas a sus
espaldas la llamaban ,la estraperlista, aunque ella lo sabía, pero pasaba de
ellas, solo una si era una amiga para ella, Milagros, porque además tenían la
misma edad.
Javier y Toñi tenían
dos hijos ya mayores, Sebastián que estaba estudiando en Madrid y vivía en casa
de sus tías en el barrio de Salamanca y Genaro al que todo el mundo llamaba
Naro desde pequeño, que estudiaba en Londres y lo veían de higos a brevas.
Toñi era una mujer
de cara triste, se le notaba que no era feliz, bueno, no fue nunca feliz en su
matrimonio, porque era una mujer romántica, necesitaba amar y sentirse amada,
pero como su matrimonio lo concertaron los padres de los dos.
Hacía varios meses
que su amiga Milagros le dijo que siempre estaba muy seria y ella le contesto
que no tenía ningún aliciente en la vida, los hijos estaban fuera, cada uno por
un sitio y su marido era como una reliquia más de la casa, entonces Milagros le
estuvo hablando de que ella se sentía igual pero que tenía un secreto que por
lo menos la hacía vivir.
En Valencia siempre
ha habido alguna casa de “hombres” ó lo que hoy en día se les llama prostitutos
ó chicos de compañía, que era donde las burguesas iban en total secreto a
satisfacer sus necesidades sexuales, era un asunto muy secreto pero todos lo
conocían, esta casa tenía como tapadera que era una casa de costura, en
realidad llevaba razón la Madame
ella cosía los deseos
desgarrados, bueno ella no, los cuatro ó cinco hombres que tenía a su cargo,
todos tenían entre veinticinco y treinta y cinco, aunque como eso era relativo
porque iban y venían cada poco tiempo.
El secreto de
Milagros era que iba a esa casa todos los jueves, Toñi se sonrió “Milagros que
tengo cincuenta años” “y qué, yo también” “sabes Toñi, eso te hace rejuvenecer
no ya por el sexo si no porque estás haciendo algo prohibido por ti misma” la
cosa quedó así, pero Milagros siempre se lo estaba recordando hasta que Toñi un
día dejó que le diera la dirección en principio para que la dejara en paz con
ese tema.
A las dos semanas
Toñi estaba sentada en la salita mirando tras el cristal de la ventana y como
un acto de rebeldía se arreglo y salió a la calle, por supuesto su marido ni se
entero que salió, fue directamente a la dirección que le dio Milagros y subió
al primer piso, llamó y salió una anciana muy bien vestida, plena de joyas “
buenas tardes, que desea””vengo de parte de Milagros”” ah, pase señora” y se sentó
en un sillón, no sabía que decir, tenía ganas de salir corriendo pero algo le
decía por dentro que se quedara.
La madame la vio muy
nerviosa “ no se preocupe, la primera vez siempre es así” le dijo la anciana a
la vez que le hacia un gesto de que se levantara “acompáñeme señora” “ me
llamo,,,,” “ aquí no se dan nombres verdaderos” le dijo la Madame, entraron en
un dormitorio muy bien acondicionado “ espere aquí y recuerde de no darle
dinero” Toñi asintió con la cabeza mientras la anciana salía cerrando la
puerta.
Al instante entró
por otra puerta un hombre bien vestido, guapo y con bigote, le dijo “ ¿es la
primera vez que vienes aquí?””Si” dijo ella cerrando los ojos y dejándose
hacer, cuando salió de la casa iba con la cabeza baja porque pensaba que los
demás sabían de donde venia, pero a partir de entonces , el primer lunes de
cada mes acudía a esa casa.
A los pocos meses ,
un lunes fue a esa casa y estando sentada en la cama, entro un hombre joven y
guapo, sus miradas se quedaron fijas una en la otra, Toñi sintió por dentro
algo que nunca había sentido, le miró sus manos y no eran como las de los otros, finas de no trabajar, estas
eran fuertes y encallecidas del trabajo, Toñi se levantó de la cama y sin dejar
de mirarlo a los ojos se acercó a él y
lo besó profundamente “ perdone la señora , es que estoy un poco nervioso” “ no
me llames señora, me llamo Antonia”” yo Pascual”” que edad tienes” “ treinta señ,,,, Antonia” y comenzaron a besarse otra vez.
Toñi salió, iba por
la calle, pero caminaba por las nubes, sentía que por primera vez en su vida,
no había copulado, había hecho el amor.
Al lunes siguiente
se volvieron a encontrar, cuando terminaron de hacer el amor y Pascual la tenia
abrazada le dijo “ te amo” Toñi con una gran alegría le dijo “ yo también
cariño”” me gustaría mucho que nos viéramos fuera de aquí” “ donde?” dijo él, “
no sé, por la calle, pasear por la orilla del mar”” yo solo con estar a tu lado
ya soy feliz Antonia” y quedaron en verse al día siguiente en un restaurant de
la playa, mientras estaban comiendo Toñi bajo la cabeza a la vez que sonreía “
que te pasa cariño?” “que acabo de darme cuenta que tengo quince años y estoy
enamorada” él le levantó la cara y la miró fijamente a los ojos” nada ni nadie
nos separará, amor mío” y se besaron, Toñi comprendió que los dados estaban
echados.
Toñi solo hacía que
pensar en cómo decírselo a su marido y sobre todo a sus hijos, sabía lo que se
iba a liar pero tenía claro que ya no podría vivir sin Pascual. La familia se reunían
todos dos veces al año, por navidad y en semana santa, la cual estaba a punto
de llegar, así que decidió soltar la bomba cuando llegaran todos para Pascua.
El Domingo de
Resurrección cuando estaban reunidos , Toñi se levantó y comenzó a hablar
“tengo que deciros una cosa a todos, pero por favor no me interrumpáis hasta el
final” Javier dijo “ chica, parece que
estas en las Cortes” Sebastián se quedó muy serio porque intuía que era algo
muy malo y Toñi comenzó “ me voy, me voy a vivir mi vida, os he cuidado como
una buena madre, creo yo, y como buena esposa creo que he hecho bien mis
deberes, pero ya me cansé de vivir para otros, ahora lo que me quede de vida
quiero vivirla para mi, he conocido una persona que me ama y me sabe valorar,
tal como soy” Javier pegó un golpe con la servilleta sobre la mesa y salió del
comedor “ tú sabes en que escándalo nos vas a meter por tu capricho” dijo Sebastián
“ hijo no es un capricho, es el verdadero amor” “ siempre has sido como tu
padre, vivís de las apariencias, de lo que diga la gente” Sebastián se levantó
y salió también del comedor, Naro y su madre se quedaron mirándose “ no dices
nada?” “si mamá, que hay que tener mucho valor para hacer lo que tú te has
propuesto y más a tu edad, pero si tu consideras que es tú felicidad adelante,
vida solo tenemos una” Toñi se levantó y lo abrazó “gracias hijo, sabía que tú
me apoyarías”.
Solo cogió una
maleta y salió de su casa sin ni si quiera mirar atrás, agarró un taxi que la
condujo hasta la estación de Fusta donde la estaba esperando su amado Pascual.
Llegaron a su pueblo
Almácera, caminaron hasta la casa de los padres de Pascual, solo estaba su
madre, y Pascual dijo “¿y padre?” está en la barraca, ya sabes, el campo no
puede esperar” contestó su madre.
Pasada una semana
Toñi se percató de que allí no estaban bien, todos estaban fingiendo que no
pasaba nada pero si pasaba, todos estaban incómodos, así que Toñi le dijo a Pascual “"¿porqué no nos vamos a
Madrid? Podemos vivir en casa de mi tío, él se alegraría, seguro” “ya te dije
una vez, que yo estando a tu lado, ya soy feliz” se dieron un largo beso de
amor.
En Madrid comenzaron
otra vida, llena de paz, amor y tranquilidad, muchas veces Toñi se quedaba
pensativa en cómo había cambiado su vida y lo feliz que era.
Pero la felicidad es
un caballo que a veces pasa demasiado
rápido por nuestras vidas, sin poder nosotros hacer nada por retenerlo. Pasado
un tiempo Toñi comenzó a sentirse cansada y cada día más y más cansada, una
tarde Pascual la vio tan mal que llamó al médico de urgencias, nada más llegar
el médico le dijo “ esta mujer hay que llevarla a un hospital” vino una
ambulancia y se la llevo con Pascual dentro también.
Después de muchas
horas en urgencias esperando que alguien le informara, salió un medico y le
dijo “ usted es su hijo” Pascual se tragó su orgullo y se limito a decir “si
señor” “ tengo malas noticias que darle, su madre está mal, creemos que tiene
un tumor de páncreas, por eso tenemos que prepararla y operarla a ver que nos
encontramos porque los análisis no nos aclaran nada” “ y cuando la operaran
doctor” “ mañana por la tarde ó pasado por la mañana”
“es muy grave
doctor” en principio no pinta bien, pero
hay que abrir a ver que encontramos”
Pascual se marchó a
casa a traerle sus cosas de aseo a Toñi,
abrió la puerta y enseguida oyó jadeos de alguien que estaba haciendo el amor, se
quedó extrañado y fue despacio a la habitación de Naro y la puerta estaba medio
abierta, era Naro haciendo el amor con su tío, se quedó sorprendido y Naro y él
se miraron sin decir nada y Pascual entro en el cuarto de baño de su dormitorio
y comenzó a recoger cosas.
Cuando salió Naro lo
estaba esperando en el pasillo “lo siento, que hallas tenido que verlo””
creíamos que os habíais ido a pasar unos días fuera”” tu madre está en el
hospital” “¿qué ha pasado? ¿Qué tiene? “aún no lo sabemos” “mañana por la tarde
o pasado por la mañana la operan” dijo Pascual mientras se encaminaba hacia la
puerta de salida “pero en qué hospital está” “en la Clínica de la Concepción”
dijo Pascual y salió.
Por la tarde Toñi
estaba dormida, le dieron un calmante y Pascual estaba sentado a su lado cuando
entró el médico “caballero tiene que salir, su marido e hijos están esperando
para entrar” “pero yo soy su pareja”” no lo ponga más difícil, por favor salga”
entonces Pascual comprendió lo que eran las clases sociales, miró a Toñi acachó
la cabeza y salió.
No se marchó, se
puso a caminar alrededor del hospital
pensando y llorando, porque no
había derecho que por ser pobre lo trataran como lo habían hecho, al anochecer
vio que salían del hospital Javier, su hijo Naro y el tío y entonces pensó que
a Sebastián si podría convencerlo para que la dejase verla, pero cuando se
encaminaba hacia la habitación salió una enfermera a prisa “ señor donde va” “
a la doscientos doce” “ lo siento caballero pero tenemos órdenes estrictas de
no dejar pasar a nadie a esa habitación”.
Pascual pasó la
noche en la sala de espera del hospital, cuando se despertó fue a la cafería a
tomar algo caliente y justo estaba allí Naro que al verlo le hizo una señal
para que se sentara con el “siento mucho por lo que estas pasando” “yo no puedo
hacer nada” “ tu como estas?”
“te puedes imaginar,
con una impotencia total” le contesto Pascual “a ella la tienen drogada para
que no se entere del dolor”” esta tarde la operan” dijo Naro levantándose y marchándose,
Pascual salió fuera a caminar un poco y fumar.
A las cinco de la
tarde la vio pasar de lejos que se la llevaban al quirófano, entonces salió
corriendo escaleras arriba hasta que llego al último piso y entró a un
despacho, quitó el hilo musical y puso una casete con la canción de ellos dos,
Toñi aunque iba medio drogada esbozó una sonrisa y una lágrima resbaló por su
mejilla, mientras la canción continuaba “ una casa infinita, un pedazo de gloria,
así fue nuestra historia, así fue nuestro amor”, después Pascual se fue fuera
del hospital a caminar por el parking para calmar los nervios, cuando pasaron
unas horas vio con sorpresa que salían todos del hall , solo lloraba Naro que
al verlo se acercó a él y le dijo” se ha quedado en la mesa de operaciones, tenía
un cáncer que se la estaba comiendo toda por dentro” “ puedo verla por favor”
susurro Pascual “ ya está en el mortuorio , allí no dejan pasar a nadie, lo
siento”.
Su familia se llevó
el cadáver hasta Valencia para darle sepultura aquí, por supuesto que estuvo
viviendo con Pascual se le ocultó a todo el mundo, en su tumba siempre había
una rosa amarilla fresca y Naro intuyo de quién era y un día esperó hasta que
vio a Pascual con una rosa en la mano y se le acerco por detrás “lo vuestro sí
que fue amor verdadero” se giró Pascual y le contestó “tu lo has dicho, fue” y
se saludaron.
“ sabes” le dijo
Naro “ nosotros de la comarca de donde provenimos, tenemos en el mismo pueblo
lo que antiguamente y durante siglos fue la Posada Real, aunque yo creo que
ningún rey se hospedó allí, pero bueno, es un edificio enorme que por fuera aún
se conserva bastante bien, pero por dentro está completamente desecho y yo la
tengo comparada con mi familia, siempre tan altiva, tan orgullosa por fuera ,
cara a los demás pero por dentro carcomida y a punto de derrumbase”” aún no os habéis
dado cuenta que el mundo ha cambiado” le contesto Pascual “ claro, y nosotros cambiaremos,
pero para que todo siga igual ¿no lo comprendes?” “bueno Pascual me tengo que
ir que se me hace tarde para el tren, cuídate”
Naro se giro y
comenzó a caminar hacia la salida del cementerio, cuando oyó un disparo, se
paró un momento sin girarse y siguió su camino.
Como dijo aquel “hay
amores que matan y conciencias que ni sangran”.