Yo no tengo el corazón oscuro,
Lo llevo negro
De tantísimo como he “sufrío”
Tu alma todavía está blanca
De color nácar,
Por besarla cada mañana
Ruiseñores de alegres cantares,
Amaneceres
Repletos de campos de flores
Se vislumbran grandes ilusiones,
Y con visiones
Llenas de nuestras lindas
canciones
Mi más grande alegría seria
¡¡Verte alma mía¡¡
Saltar las flores de alegría
¡¡Qué tiempos aquellos, vida
mía¡¡
Cuando vivías
¿Aún un sueño, de mi “vía”?
Pero no puede ser amor mío
¿Será estío?
Mi querido amigo, tu corazón es blanco como el algodón, tus letras son nostalgia del verdadero amor.
ResponderEliminarTe sorprende verme aquí, lo sé
Un abrazo fuerte.
Si mi querida Viviana me sorprende mucho verte por aquí, como se nota que me aprecias por tus palabras, se bienvenida a mi blog, cuídate mucho y un fuerte abrazo.
EliminarMuy bonito.
ResponderEliminarMuchas gracias Diana, muy amable por tu parte, un saludo.
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