Tengo frio en el alma
El estropeado corazón
ardiendo
Y un presentimiento
de mal augurio
Tengo tú nombre
marcado a fuego
Tú sonrisa clavada en
mi pena
Como ganado bravío,
para toda la eternidad
Tengo tú cuerpo
grabado
En mis ojos, ya
marchitos
Pero lo puedo
recordar por cachitos
Tengo que me llora,
hasta mi sombra
De tanto recordar a
solas
Tantas promesas
incumplidas
Tengo hambre de tú
añoranza
De que me digas, lo
que me echas de menos
Cada anochecer y cada
amanecer sin vernos
Tengo ganas de ver tú
cara
Reflejada en mi
último grito
De desesperación
llorando contigo
Tengo el pensamiento
hirviendo
De pensar en tus
silencios
Y de contemplar tus
hechos
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