No busques más en el añejo cofre
De los tan muy amarillentos
recuerdos
Porque puede, que no sean los
mismos
Añorados que dejaste al ser
hombre.
No quieras ocultar tus viejos miedos
De ellos, quizás nunca saldrás indemne
Porque siempre habrá alguien que
recuerde
Quiérelos, como quien yace con
muertos.
No hay que tener miedos a tú
pasado
Porque el pasado, rara vez ya vuelve
Con penas, glorias para ser amado.
Y no grites al mundo tus pesares
Nadie habrá ofreciendo su pobre hombro
La vida, ya es solo para
triunfadores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario