Quiero desgarrar mis
vestiduras
Y ofrecerte, mi pecho
desnudo
Para que claves en él,
tus indiferencias
Porque no hay nada
más doloroso
Que te destrocen el
corazón amoroso
Infamias de los
envidiosos
Yo, te hice, un
collar de alhelíes
Para tu hermoso pelo
azabache
La gente, no soporta
vernos felices
Si la envidia fuera
corrosiva
No hay comentarios:
Publicar un comentario